BAILANDO POR UN PUESTO

Finalmente se dio a conocer la lista de jugadores que no van a continuar en el CAI. Los nominados son Scurnik, Hernán García, Iturraspe, Bordón y Damián Pereyra. Los que aún no se definieron y tienen chances de quedarse son Oscar Canteros, Gastón Aranda, Balcaza, Ezequiel Alonso y Fernando Cáceres.

LOS BAILARINES
El Pipi García se fue hace rato, casi nunca vino. Arrancó la temporada con 5 fechas de suspensión y cuando estaba por regresar se lesionó. Jugó tres partidos en total, dos ingresando como suplente y uno como titular ante Atlas en donde se molestó cuando fue sustituido. Esto marca por qué un jugador de la clase de García el Verde lo “encontró” en Muñiz. Sin dudas no quería continuar en el Club.

Federico Scurnik: Su rendimiento en el Verde fue irregular aunque de menor a mayor, arrancó con muchas dudas y se fue consolidando aunque no fue un arquero que le salvara un solo partido al Verde. Se negó a ir al banco ante FC Urquiza en Morón y aquella tarde ya se sabía que no continuaba.

Bordón y Pereyra eran los contratos más altos. Sin dudas que no rindieron lo que se esperaba de ellos. Iturraspe arrancó de titular pero su nivel fue decayendo hasta casi no participar del equipo. Le pesó la camiseta al ex Paraguayo. El caso de Bordón es diferente, jugó 17 de los 19 partidos pero nunca se consolidó. Jugando en el medio con el Wity tuvo algunos partidos buenos, pero cuando tuvo que dedicarse a la marca quedó muy expuesto y tuvo un fin de temporada más que pobre.

Damián Pereyra llegó de Barracas a préstamo sin cargo pero nunca se pudo ganar el puesto. Arrancó como indiscutido pero mostró poco y nada. Comenzó a ser la variable de recambio en cada partido hasta que desapareció del equipo. Con Ballester apareció de media punta y metió dos goles pero fue un espejismo. Los últimos partidos jugó de 4, una posición que obviamente no es la suya.
LAS POSIBILIDADES
De los 5 jugadores que aún no definieron su situación, los que casi seguro emigren son Canteros y Aranda que tiene otras ofertas y no aceptarían recortes en sus sueldos. Canteros tuvo poca continuidad y cuando estaba empezando a mostrarse salió el tema de los “electros” que lo paró unas semanas. Cuando regresó no lo hizo en el nivel que venía teniendo. Aranda tuvo nulas chances de entrada, y cuando lo pusieron rindió, es quizás de los casos que menos se entiende el por qué de su salida. Falta definición y hay que aguardar.
Balcaza, Ezequiel Alonso y Cáceres tienen grandes chances de quedarse. Bazán espera mucho de Cáceres y le terminó dando la continuidad que no tenía. Lo que no parece es sentirse demasiado cómodo en la posición que juega. Cuando Aldo lo retrasa para Ituzaingó es un jugador menos. Cuando juega más suelto se lo nota con más confianza, aunque demostró poco y nada.
El caso del Beto Alonso también es bastante discutible. De los volantes fue el que menos chances tuvo y su rendimiento no fue nada malo. Siempre entró para remendar el equipo y jugó en puestos tan insólitos como de marcador lateral. Pero tiene la garra que otros volantes no demuestran. Merecería una nueva oportunidad, o mejor, una oportunidad.
Balcaza alternó con Frisani, como Goycochea / Islas. ¿Resultado? No rindió ni el Coco ni Balcaza. De lateral le cuesta más ya que no tiene mucha marca pero de volante le rindió al Verde. Habrá que ver que pasa la “ardilla”.

LOS MOTIVOS
Los motivos de la sangría son fundamentalmente económicos. El club tenía previsto bajar allá por octubre en un 40% el presupuesto debido a la caída de algunos sponsor importantes. Cuando estaba todo dado para implementarlo el León metió dos victorias consecutivas y se decidió hacer un esfuerzo hasta diciembre. Los resultados le dieron un empujoncito a una decisión que parecía tomada pero congelada por sólo unas fechas.
Los motivos del bajo rendimiento no hay que buscarlo solo en los jugadores. Muchos jugaron en puestos que no son los suyos o alternaban la siguiente secuencia en una fase de tres partidos: Titular indiscutido / Mirarlo de la platea / Al banco con suerte. Eso el técnico tendría que reveerlo, ningún jugador va a demostrar todo en un partido por bueno que sea, y hablamos de la D donde los jugadores buenos no son lo habitual.
Los jugadores sí deberían dejarse de hinchar la pelotas y terminar con los quilombos internos. Los pingos se ven en la cancha y no cagándose a patadas en los entrenamientos.
Los que siguen de los nuevos son Carloni y Silva, ambos rindieron y continuarán. Carloni arrancó convirtiendo y después se quedó. Pero sin dudas son de los que más transpiran la casaca junto al Pájaro Silva.