El Verde terminó el año manteniendo la interminable racha de partidos sin ganar de local. En la primera etapa generó las chances para ponerse en ventaja pero falló en la definición. En el complemento el partido estuvo más parejo y terminó empatando a poco del final.
¿Y para que está este equipo? Todas las fechas surge esa pregunta, y las respuestas van variando. Ante el Salaíto el León tuvo varias chances para ponerse arriba en el marcador pero sigue sin poder hacerle un gol ni al arco iris. Buono cabeceó desviado, Sebastián Benítez perdió dos chances claras y Ariel Fernández metió un tiro de 30 metros que parecía el 1-0 pero el arquero la sacó por sobre el travesaño.
En la segunda parte, esa superioridad decayó y un error de Carbone hizo que el visitante se pusiera en ventaja con un cabezazo en las afueras del área que Carbone no llegó a cortar y la pelota entró mansita.
De ahí en mas fue todo desesperación, y el Rosarino mereció liquidarlo y como dice el viejo refrán, goles que errás, cagaste fuego.
Carbone se rehizo y tapó varias de gol (junto al 1 de Rosario fueron las figuras) y el Verde iba por el empate con sólo la fuerza de voluntad. De todos modos el León tuvo muchas menos llegadas que en la primera etapa.
Sin dudas que Palavecino demostró ser un jugador distinto, que la pide y encara pero que también es capaz de meter una pelota entre líneas.
El Verde se fue frustrado y eso que llegó al empate a 8' del final tras un centro que definió Couceiro entrando por el segundo palo fusilando al arquero. De todos modos, el empate no le sirve al Verde y lo mejor que le pudo haber pasado fue que se terminara el campeonato para barajar y dar de nuevo. Veremos si Benítez es capaz del milagro que los hinchas se resisten a resignar. Pero el sábado, volvió a quedar en deuda.
Una tarde para el olvido fue la que vivió Ituzaingo en Cañuelas. Porque sumo su segunda derrota consecutiva, porque dos pilares de su equipo como el Mono García (fractura de peroné) y Hernán Luzzi debieron salir lesionados y por si fuera poco le toco sufrir el mal arbitraje de Claudio Lozano.Un León diezmado fue el que visito a Centro Español, ya que no podía contar con la presencia de varios de sus jugadores habitualmente titulares por culpa de suspensiones y sobre todo lesiones.El encuentro arranco bastante trabado en la mitad de cancha y ningún equipo se imponía dentro del campo de juego. Centro Español, gracias a un pelotazo pudo abrir el marcador. Porque en supuesto off side Patricio Costa Repetto, ex delantero del Verde, se escapo por la derecha, definió ante el Mono García que tapo su remate y de rebote Fidalgo no tuvo mas que empujarla hacia el fondo de la red.
Luego llegaría la lesión del Mono García tras un choque con Costa Repetto. El Verde quedo con un jugador menos en la cancha ya que había hecho todos sus cambios y Alomo debió ocupar el arco. Pese a esto el León siguió insistiendo pero la derrota ya estaba decretada. 
Así, el festejo del Wity por sus 200 partidos no pudo ser tal, más aún cuando el Piojo Páez debió dejar la cancha tras un choque de cabezas con Loto. El Piojo fue internaod en el hospital de Haedo y tendrá para un mes de recuperación.
Aquí, una foto del memorable día en que Roldan y Zygal se disfrazaron de Vázquez - Iñiguez para poder llegar hasta la radio y dar la entrevista pautada. Así por lo menos lo dijo Clarinete, y la verdad, no queremos coartar más su libertad de empresa, perdón !, de prensa. Ya bastante tienen como para descreer de sus noticias y fuentes.
En la línea defensiva lo del Verde fue más que positivo, siempre teniendo en cuenta el rival. Páez en función defensiva sobresalió por sobre el resto mientras que Ariel Gómez fue salida permanente del León. Luzzi apareció cortando pelotas definitorias cuando Ballester intentó preocupar o ante un error puntual. Quizás la defensa en sí mostró algunos desacoples a la hora de volver y casi lo paga caro, y fue así que Couceiro se ganó la amarilla por bajar de un patadón a un rival. Pero no dejó de ser una jugada aislada.
Quizas el Verde necesita más de Marcos Zampini, más participación en ataque aunque en la tarde de Villegas tuvo dos chances netas. Sin embrago, sabemos que Marcos puede rendir muchísimo más y ser otra opción en la generación de fútbol.
Ituzaingó intentó jugar en una cancha que se encuentra casi en perfectas condiciones, sembrada. Casi que no había excusas. Y el Verde por suerte pudo cambiar la cara.
Sirvió para ganar, para achicar distancias, y por sobre todo para trabajar con más tranquilidad esperando que el resto del equipo se contagie y de a poco todos vayan retomando el nivel por el cual juegan o fueron contratados para venir al León.
Quizás haya sido Diego Gómez quien más rindió en el puesto de enganche o volante con más vocación armar juego. Pero el ex Argentino de Quilmes sólo disputó ese encuentro.
Y el 9 a pesar de las pocas chances que tiene se las arregla siempre para generarse sus espacios, aunque termina desgastado de tanta lucha. Esta tarde, ante el Lobo se tiró por momentos demasiado atrás al no llegarle la pelota, pivoteó más de lo que pesó en el área y con el ingreso de Alonso en el complemento, hasta terminó tirándose a la punta derecha. Claro está que no es el lugar más recomendado. En los primeros minutos fue el Lobo quien manejaba los hilos del partido. De a poco el partido se emparejó y los dos tuvieron sus chances, aunque las del visitante fueron más claras. 
García se lució en un mano a mano y un defensor del Verde la sacó casi de adentro en otra jugada de riesgo en que el Mono había fallado tras un centro desde la izquierda del ataque del visitante. El Verde tuvo sus chances en base a centros, pero es difícil contabilizar esas jugadas como de real peligro. Silva tuvo la chance de sacarse la mufa tras un error de la última linea pero definió débil y se la terminó entregando en las manos a Bello. Mastrángelo, el árbitro del partido, sinceramente dejó jugar demasiado y en las áreas pasaba de todo. amonestó a Buono por una supuesta simulación, pero después, obvio un claro empujón al Seba Benítez.
De todas maneras tuvo dos chances para ganarlo, una corrida de Nicolás Alonso que llegó muy forzado para definir ante la salida de Bello y un cabezazo que de la nada encontró Matías Gelpi. Bello se estiró y la sacó al corner cuando la pelota se metía en el ángulo.
Increíblemente Juventud Unida se quedó durante un tramo de la primera etapa con 9 jugadores. ¿Que pasó? Dos de sus volantes, el 8 y el 10 debieron ser atendidos fuera de la cancha tras un involuntario choque entre sí. Cuando ambos se recuperaron con el trascurso de los minutos, su número 10 nuevamente volvió a sufrir un golpe, otra vez de un compañero ! Increíble.
Cómo le gustan las cámaras a Bello !!! El ex arquero de Atlas hace difíciles las que son fáciles, trata de hacer lo imposible por revolcarse aún cuando la jugada no pareciera requerir esa acción y sorprende hasta a sus propios compañeros. De todos modos, con la pelota que le sacó a Gelpi sobre el final se reivindicó.
El partido fue pobre pero con algo más de emoción respecto a lo visto ante el Mate. Ambos equipos intentaban llegar al arco rival a puro pelotazo y así el León pudo convertir dos veces, primero con un cabezazo de Silva que dejó a Buono reclamándole el pase casi abajo del arco y un tiro libre que casi emboca Páez y se fue a centímetros del palo izquierdo del 1 local. 
Puerto Nuevo preocupaba con largos envíos que casi siempre encontraban a la defensa del Verde mal parada, perdiendo siempre la espalda por el sector derecho. 
Ariel Gómez hizo su debut y demostró ser un lateral con vocación ofensiva, algo de lo que carece el Verde ya que ni Páez lo venía logrando en esa posición y tampoco Loto por izquierda. El Verde encontró una buena variante para asociarse con Barzola o quien vaya por derecha. 
El Wity sin jugar un mal partido, sigue estando muy lejos de su nivel acostumbrado, Barzola fue lo más clarito en el medio y Lemos pasó casi desapercibido, no pudiendo manejar la pelota casi en ningún tramo del partido. Arriba, solo la lucha de Buono que ganó y perdió pero las peleó a todas. Silva, parece estar fastidioso desde que entra y cuando las cosas no le salen termina amonestado como en casi todos los partidos. 
En la etapa final la tónica del partido fue similar, sólo que Puerto Nuevo esperaba un poco más atrás. La expulsión de Godoy en Puerto Nuevo animó al Verde, Szeszurak puso un delantero (Nicolás Alonso) por un defensor (Ariel Gómez) y esta vez le salió bien.
Golazo del Seba que se desahogó y festejó como loco. El Verde parecía tener el partido controlado, en ventaja y con uno más. Lo pudo definir en algún centro pero sobre el final, cuando se jugaba tiempo adicional, terminó sufriendo. El Mono García que venía de responder con cierta inseguridad un centro, se destapó sobre el final y atajó una pelota increíble sobre su palo derecho cuando toda la platea del local gritaba el agónico empate. 
Hubiera sido injusto, porque el Verde a pesar de sus limitaciones fue superior. Y lo ganó de la mano de sus experimentados, Con García atajando pelotas importantes, con Luzzi siendo el más importante del fondo, con la aparición de Seba Benítez que tuvo una solo y la mandó a guardar y con un Buono que por más que no convierta es siempre importante por lo que arrastra.
PERLITAS II
