27 de abril de 2014

TANTAS VECES ME MATARON...

..

 “Tantas veces me mataron, tantas veces me morí
     Sin embargo estoy aquí, resucitando”.


Cómo tenemos una cámara de fotos que saca unas placas impresentables, decidimos presentar de aquí en más el informe con un tema musical que refleje lo que fue el partido.
En este caso vamos con uno de la Gran Negra Sosa, que con el párrafo con que se inicia esta crónica, da cuenta en 13 palabras lo que se sintió en la tarde de Soldati.
Aceptamos críticas como que “con este tema te querés pegar un tiro en los huevos”. Pero hay que decir que incluso en este ítem, el tema va de la mano con lo que fue el partido.
El Verde tenía una verdadera final que enfrentar, pero jugó un partido desastroso, si perdía 2-0 a los 30’ del segundo tiempo nadie podía decir nada.
Las caras de los dirigentes / allegados / periodistas partidarios/ Pseudo periodistas / pseudo partidarios / colados / gente que no se sabe cómo entra / vendedores de maní / vendedores de pseudo maní / vendedores de fotos / perros partidarios que no paran de ladrar / pseudos perros / etc que estaban en la popular visitante era la de aquellos que son obligados a ver una novela de Suar cuando apenas uno llega de trabajar.
Todos saben que la novela en sí es una mierda, pero hay que fumársela todo el año, porque tiene final feliz. Acá ni siquiera eso.
El Verde ganó uno de esos partidos que uno no sabe cómo explicarle a quién no fue a la cancha. No dio pie con bola en todo el partido y se fue festejando.
Lescano es el primer responsable de la victoria, el Mono tuvo dos atajadas terribles que le dieron vida al Verde en el primer tiempo, un cabezazo y un mano a mano ante el Guaraní Miranda Moreira. Ituzaingó apenas si se acercó al arco del arquerito Vega con un remate de Aliendro y otro de Zampini, pero no llegaron a ser chances de gol netas.
El planteo de Damián no dio resultado, en ofensiva el Verde fue un equipo apático, con un Aliendro que las guapeba pero que no generaba nada peligroso. Gauna corría la misma suerte, perdía más de lo que ganaba. Bruno sólo arriba participaba poco y nada.
Y cada tanto el Lila preocupaba a Lescano que mantenía el cero y la esperanza de revertir el guión de Suar.


En la segunda etapa el Verde seguía repitiendo errores y frases de Panigassi, Sacachispas encontraba el primero de cabeza tras un tiro libre. Banegas la mandaba a guardar y parecía enterrar todas las chances matemáticas.
Pero increíblemente el Verde no reaccionaba, estaba para el cachetazo. Regalado en defensa Sacachispas se perdió tres goles imposibles. Lescano respondía como podía y seguía dándole vida al León.
Pero se notaba un equipo perdido, sin ideas. Recchia y Tellas se metían al campo de juego para tratar de cambiar la historia. Ituzaingó estuvo “ido” del partido desde el gol del local, por veinte minutos. No le generó una sola chance de gol y apenas si rogaba que Sacachispas no lo pudiera liquidar.
El panorama era de resignación total, no había respuestas. Hasta que apareció de la nada a los ST 35 el Loco Recchia para empujar la pelota tras una jugada iniciada desde la izquierda. Empate, locura, ilusión, enajenación. ¿Quién hizo el gol? Aliendro decía uno, Gaby Tellas decía otro. Nadie vio un carajo. No se veía nada a 50 metros del arco que daba a la autopista. Que mierda me importa quien lo hizo gritaba otro.


Empate y a mirar el reloj, quedan 11’. Ituzaingó que estaba para el cachetazo, muerto, golpeaba la puerta del cajón para decir, esperen !!!
Y el equipo a partir de ahí se transformó. Le generó 5 chances clarísimas de gol en lo que quedaba del partido, incluyendo los dos goles.
A los dos minutos de empatar el Loco entrando por derecha trató de rematar, lo taparon, enganchó para la zurda y casi abajo del arco remató por sobre el travesaño.
Tres minutos después el Coni Vallejos se lo perdió de cabeza abajo del arco, cabeceó de sobrepique y la pelota se fue alta.
Dos minutos después, una jugada calcada, cabezazo de sobrepique arriba, vaya uno a saber de quién. Sinceramente desde nuestra posición era adivinar. Una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa.
El Lila tuvo dos contras que pudieron ser letales pero el Verde lo tenía acorralado. Estaba para cualquiera. Benítez adicionaba cuatro minutos y la sensación era ambigua hasta allí. Se había jugado como para perder claramente, pero se había empatado. Pero no daba ni para esbozar una sonrisa. El empate no servía aún teniendo en cuenta cómo se había dado el partido.
Cuando ya se habían jugado tres de los cuatro minutos (¿recuperados?) Aliendro encaró por el centro del campo y empezó a limpiar muñecos hasta que lo bajaron al borde del área. Iban ya 48’. Marcos agarró la bocha y cuando todos pedían “fierrazo” sencillamente la colgó del ángulo con suavidad magistral por sobre la nutrida barrera del local. Golazo.
Locura, adentro de la cancha y afuera, en la cabecera del Verde. Jugó para morir, estuvo al borde, pero vaya uno a saber por qué, salió ileso.
Un minuto más dio Benítez porque el festejo fue interminable. Y un centro más sufrimos. Pero ya nos habíamos bancado la pedorrada de la novela de Suar, así que era hora de que el final feliz se hiciera presente.
Pitazo final, seguimos vivos ! Estar cerca es muy bueno (?). Nos cansamos de jugar bien y merecer, algún día la taba tenía que caer para este lado. No nos den por muertos señores, vamos a pelear hasta el final.


FINAL CON PIEDRAS
Para variar, la Policía (en este caso Federal) volvió a dar la nota. Dejó sin custodia el sector visitante y de no ser por la paciencia de la gente del Verde, todo hubiera terminado peor. Liberó la zona y algunos púberes de Sacachispas ingresaron al estadio promediando la segunda etapa, simplemente abriendo un portón que estaba sin candado.
Cuando finalmente se hicieron presentes y les indicaron a los adolescentes que ese no era su lugar, volvieron a dar la nota.
Con la victoria agónica del Verde empezaron a llover piedras desde afuera del estadio. La policía respondía con dos acciones: La primera, esquivar las piedras (son policías, no boludos), la segunda filmar a los allegados de Ituzaingó, cuando estaba claro que quienes armaban quilombo eran los locales.
Sacachispas con suerte junta 100 personas (pero con mucha suerte, onda ganador del Loto) y no podían controlar a 50 pibes que se creían Barras tirando piedras.
La pasividad de la Policía fue tal que en determinado momento abandonaron el estadio corriendo a los tira piedras dejando sin custodia el estadio.
Lo peor es que seguramente el Club local va a ser sancionado, cuando los que deben garantizar la seguridad son los de gorra que cobran por eso. Lo de los clubes pagando las  boludeces que hacen los descerebrados es el cáncer del fútbol, lo que mata poco a poco a los clubes. Más cuando son 25 nenitos que tiran piedras. Si no pueden controlar eso, estamos fritos. Pero los clubes tienen también su parte de culpa, en no saberse plantar todos juntos y no dejarse sancionar cuando los de come-pizza hacen las cosas mal. Si no se revierte esto, vamos a seguir a merced de 15 Bart Simpson que buscan fama tirando piedras.


ITUZAINGÓ: Matías Lescano, Nicolás Vallejos, Leandro Scipione, Emanuel Mantovani y Lucas Escobedo; Marcos Zampini, Oscar Ibáñez, Jonathan Di Toro y Nicolás Gauna; Rodrigo Aliendro y Bruno Rodríguez.
GOLES: ST 11’ Banegas (SAC) – 35’ Recchia (ITU) – 93’ Zampini (ITU)
Cambios: Gabriel Tellas por Rodríguez, Jonathan Recchia por Di Toro, Rodolfo Gómez por Escobedo.
Suplentes: Ferreiro, Sicari, Cristaldo, Gelpi.
Arbitro: Cristian Benítez.
DT: Damián Troncoso.


Por Cinquito.

18 de abril de 2014

NO LO PUDO ENTERRAR



Ituzaingó igualó 0-0 el clásico ante los del Fondo, y aunque tuvo las más claras, se quedó apenas con un punto que sirve de poco.
En la vuelta de Damián Troncoso como DT, el Verde al menos cambió la cara de equipo derrotado que había mostrado el domingo pasado en la Isla Maciel.
Desde el primer minuto fue quien se adueño de las acciones y tuvo la apertura del marcador en los pies de Zampini que tras un lateral casi se la manda a guardar a Cabrera que pudo quedarse con la bocha.
Damián volvió a apostar a su estrategia del doble nueve y no le resultó en líneas generales. Aliendro intentaba ser la manija del equipo pero todo quedaba en el arranque de las jugadas porque estuvo impreciso en el último pase. Nico Gauna también se mostraba como una alternativa pero tuvo una tarde para el olvido a la hora de enviar los centros.
Arriba, Tellas hacía lo que podía jugando por las puntas. No se le puede pedir que desborde, se nota que no es su posición.
De todas maneras el Verde se las arreglaba para cada tanto inquitar a los del Dofon, incluso Tellas se perdió un gol increíble en donde no logró definir pisando el área chica.
La visita, miraba y esperaba. Cuando podía respondía con un remate de Inguimbert desde afuera que atrapó Lescano. Toledo también tuvo una chance pero definió con frialdad, en el sentido del frío que hace en Libertad.
En el complemento los del fondo salieron un poco más del idem, plantearon un partido más en campo rival y el partido se emparejó. Inguimbert metió una chilena que besó el travesaño de Lescano. Ituzaingó también intentaba, pero cada vez con menos precisión.
No iba a durar demasiado las ganas de los del fondo de presionar arriba, con el tiempo se fue diluyendo y el Verde volvió a adueñarse del partido. Gauna tuvo una chance inmejorable entrando por izquierda pero definió ancho y la pelota se fue cruzando todo el arco de los de Libertanga.


Enseguida llegaría la jugada de la tarde: Tiro libre de Gauna desde la derecha, se la bajan a Bruno Rodríguez de cabeza y el 9 de Paso de los Libres, Corrientes que la manda al fondo de la red de derecha. El cara de verga que ofició como asistente de Colombo, levantó la banderita y todo seguía 0-0.
Los del fondo empezaron a darse cuanta que un empate no era un mal resultado y el Verde de porfiado seguía intentando, con las apiladas de Aliendro y de Gauna. Les faltó a los dos la puntada final. Lo volvió a tener Marcos pero un rebote en un rival le salvó las papas a la visita que a esa altura ya tenía el micro debajo de los tres palos.
En líneas generales el Verde cambió la cara y si bien no ganó, va a pelearla hasta el final.
Escobedo dejó atrás malas actuaciones y fue un León en, con perdón de la palabra, fondo junto a Mantovani. El Coni Vallejos también cumplió.


En el mediocampo Marcos apareció con chispazos y Gauna y Aliendro tuvieron buenos arranques pero nunca la terminaron bien. El Pety estuvo a punto de irse expulsado cuando se tiró con los dos pies hacia delante pero como dirigía Colombo, todo quedó en sermón de mitad de cancha.
Arriba, es difícil pensar en armar juego si se juega con dos 9, Bruno cumplió peleando todas a morir, Tellas tuvo que bailar con la más fea, tratar de desbordar, algo que está claro que no es lo suyo.
Mientras haya vida hay esperanzas dicen, así que vamos por la heroica.

ITUZAINGÓ: Lescano, Vallejos, Scipione, Mantovani y Escobedo, Zampini, Ibáñez, Gauna y Aliendro, Rodríguez y Tellas.
Cambios: Gelpi por Tellas, Recchia por Escobedo.
Suplentes: Ferreiro, Sicari, Di Toro, Cristaldo, Lucano.
DT: Damián Troncoso
Arbitro: Colombo (impresentable)
Estadio: Acia

Por: Cinquito


15 de abril de 2014

CAIDA Y RENUNCIA DEL DT: VUELVE TRONCOSO



El Verde cayó 0-3 en la fría mañana de la Isla Maciel sin atenuantes. Fue goleado 3-0 con anotaciones de Acevedo y Cano en dos oportunidades, cuando se jugaba tiempo de descuento.
San Telmo fue superior y se puso en ventaja, algo que serí imposible de revertir para el Verde. Gauna impreciso no podía ser ese jugador desequilibrante que conocemos y poco ayuda del resto para generar riesgo.
Apenas el Verde probó con remates muy lejanos como de Di Toro, Recchia o Vallejos. Hubo un penal claro sobre el cierre de la primera etapa pero Iglesias demostró que es bastante cagón y no lo sancionó entre las sonrisas de la gente de la platea.
En el segundo tiempo el Verde seguía con vida porque tanto Segundo, como Zuleta como Acevedo desperdiciaban chances. Esperabamos esa jugada aislada que nunca llegaría. Apenas el Verde preocupó con un cabezazo de Bruno aunque sin fuerza y la más clara de Zampini que también de cabeza remato sobre el travesaño.

San Telmo sufrió pero en tiempo de descuento, a los 92 y 94 minutos amplió la ventaja a través de dos goles consecutivos de Cano.
Final con goleada, gritos de ole desde la tribuna y desolación total en el equipo que se fue cabizbajo y respondiendo insultos tanto de la gente de Telmo como de los colados de Ituzaingó.
La noticia del domingo llegaría apenas dos horas terminado el partido. San Martín que se había despedido "hasta el martes" en el vestuario, terminó presentando la renuncia.
EL plan B que parecía ya tener forma era el regreso de Damián Troncoso, quizás el único que podría llegar a mantener al Verde en la categoría justamente porque es quien armó este ahora muy diezmado plantel.
Este martes asume Troncoso y tendrá su primera final nada menos que ante Midland, el próximo viernes.
Para el viernes serán bajas Rodolfo Gómez y al parecer el Loco Recchia qiuen sufrió un fuerte golpe en la rodillas. Serán de la partida Rodrigo Aliendro y Emanuel Mantovani qye regresan de sus suspensiones.

 
ITUZAINGÓ: Matías Lescano, Matías Vallejos, Leandro Scipione, Lucas Escobedo y Rodolfo Gómez; Marcos Zampini, Oscar Ibáñez, Jonathan Di Toro; Nicolás Gauna; Jonathan Recchia y Bruno Rodríguez.
Suplentes: Ferreiro, Sícari, Cristaldo, Grecco, Gelpi. 
Cambios: Gabriel Tellas por Di Toro, Gastón Lucano por Jonathan Recchia
Amonestados: Oscar Ibáñez
Expulsado: Rodolfo Gómez


DT: Hernán San Martín





7 de abril de 2014

Y LA RE CONCHA DE SU MADRE


El titulo refleja el sentimiento del hincha del Verde que festejaba al finalizar la primera etapa un triunfo parcial que lo sacaba al Verde de la zona de descenso.
El Verde hizo un gran primer tiempo y si bien Lafe fue quien tuvo la primera del partido al minuto, se las arregló para irse al descanso con dos goles de ventaja.
Un bombazo de Bruno abrió el marcador y Zampini (cuando no) puso el segundo cuando se moría la etapa inicial.
Laferrere que venía de 12 partidos sin perder no reaccionaba. El Verde lo tenía contra las cuerdas. El pitazo de Bresba mandaba a las duchas a un equipo que parecía comerse crudo al rival.
Pero en el complemento, Quiroga mandó a la cancha a la Vieja Moreno por el Canario Blanco y el Villero se jugó a matar a morir.
No estuvo lejos de morir ya que Marcos casi pone el tercero pero se la sacaron en la línea. Enseguida Gauna tuvo un mano a mano pero increíblemente se lo perdió. Monasterio quedó tendido y Laferrere agotaba los cambios.

La visita iba a insistir hasta que se comiera el tercero o hasta descontar. Y por desgracia Coassini por derecha picó y definió ante un Lescano que salió muy lejos.


No tuvo el Verde tiempo de reaccionar, Laferrere era un vendaval y se venía por todos lados. Tres minutos después Galeazzi le quemaba las manos a Lescano tras una serie de rebotes y ponía el 2-2. Volver a empezar cuando quedaban todavía más de 25 minutos.
Laferrere seguía yendo y el Verde parecía groggy, no reaccionaba. Apenas si el parate del partido por un problema en la red del arco que defendía el ingresado García pudo emparejar el partido.
Lescano tuvo que salir a apagar un par de incendios en defensa y en ataque el Verde jamás volvió a preocupar. Tellas y Lucano ingresaron pero tuvieron una tarde para el olvido en las pocas que tocaron. Lucano probando en todas desde lejos y definiendo muy mal, Tellas haciendo extrañas piruetas en cada jugada que le tocó intervenir.
Gauna seguía siendo lo más claro del Verde pero terminó fundido. Un verdadero crack el ex Italiano.
El plantel quedó muy cortó, si se pensaba en aguantar el partido no había recambio. Con la ida de Bevcar, de Dallera y la lesión de Di Toro, era apostar a un pibe. Y se sabe que en estas circunstancias es más quemarlo que otra cosa.
Desde afuera dio la sensación que Moreno jugó sin marcas, el Wity estaba solo batallando en el medio y ninguno se le pegaba a “La Vieja” para impedirle meter esos pases venenosos.
Ituzaingó capaz pecó en eso, en no tapar al 10, o quizás no tenía con qué hacerlo.
Otro empate con sabor a derrota que puede dejar dos sensaciones, según se sea optimista o pesimista. Que este equipo te pinta la cara cuando se levanta bien, o que no sabe aguantar un partido.

Pero no estamos muertos, estamos a tan sólo un partido de salir del infierno. Y quedan siete. Hay que seguir peleándola, que de esta salimos todos juntos ¡

ITUZAINGÓ: Matías Lescano, Emanuel Mantovani, Leandro Scipione y Lucas Escobedo; Nicolás Vallejos, Oscar Ibáñez ©, Rodolfo Gómez y Marcos Zampini; Nicolás Gauna; Jonathan Recchia y Bruno Rodríguez.
Cambios: Gastón Lucano por Recchia, Gabriel Tellas por Rodríguez.
Goles: 7’ Bruno Rodríguez (ITU) 42’ Marcos Zampini (ITU) 62’ Coassini (LAF) 65’ Galeazzi (LAF)
Árbitro: Sebastián Bresba (mal)
Estadio: Carlos Sacaan


Por Cinquito

2 de abril de 2014

Y SI NO ME TIENEN FE...




Pitazo final. Puño apretado del Coni Vallejos pegado al alambrado de lo que era la vieja tribuna visitante de Luján. Ahí estaban todos los corazones Verdes que fueron a Luján pensando que todavía quedaban chances. Dirigentes, periodistas y colados festejando. Desahogo grande adentro y afuera de la cancha. Un racimo de jugadores abrazados que pudieron cambiar la cara y volver a soñar con quedarse.
Tras el partido con Excursionistas, parecían casi remotas las chances del León, no tanto por lo numérico, sino por lo demostrado en el campo de juego.
Si bien todos los partidos son claves, este parecía ser la bisagra: Perder y quedar casi condenado, ganar y cambiar el chip, pensar que se puede.
Y el Verde mostró su mejor versión, le ganó con justicia a Luján por 2 a 0 sin sufrir demasiado. El local se quedó sin DT y se mete de lleno en la pelea por la permanencia.


Con la expulsión de Aliendro saltaron a la cancha Vallejos y Gómez y los dos se comieron la cancha. Ambos son jugadores que contagian, que le pueden o no salir las cosas pero que le meten una actitud terrible. Del Coni ya lo sabemos, pero el “negro” volvió a jugar tras varias fechas y demostró el mismo nivel de cuando venía jugando. Sin dudas que perdió el puesto sólo por el cambio de técnico, y por ser un “desconocido”.
El Verde arrancó con tres en el fondo pero con Gómez y Vallejos por las bandas en el centro del campo que bajaban según lo requería el partido. La defensa ganó en seguridad, Luján no inquietaba. El Verde era el que quien proponía más con un Gauna que inquietaba pero le faltaba la puntada final.


Pero desde la otra punta llegaría la apertura del marcador, un centro Gómez desde la derecha que Di Toro mandó al fondo de la red. A los pocos minutos el local se quedaba con 10 tras la expulsión de Federico Díaz por agresión al Tano Scipione.
Otra vez, todo a pedir del Verde. Pero la inseguridad de los partidos anteriores hacía pensar que había que tomar todo con cautela.

Tras una pelota en cortada, Rodolfo Gómez tuvo el segundo pero su definición dio en el travesaño, increíble como no ingresó. Parecía que había que sufrir.
Rubino empezaba a vender humo y a emparejar las acciones, amonestaba a Lescano por demorar cuando el arquero no sacaba porque había un jugador del Verde caído en el campo de juego.
Y tras esa amonestación el 1 del Verde sacó un bombazo terrible que era el empate del Lujanero. Gigante el Mono. Sufrir y sufrir.
Tras el entretiempo, estaba claro que el partido no iba a terminar 1-0, que el local debería arriesgar y el Verde tendría chances de definirlo.
Pero el local jamás inquieto al Verde que estaba más cerca del segundo que el local del empate. Pero había que definirlo. Eterno dilema.
Gauna se lo perdió de cabeza y parecía que el Verde iba a sufrir hasta el final, hasta que apareció Marcos Zampini para mandarla a guardar tras un centro del Coni desde la derecha. Gol y alivio, festejo dentro de la cancha y en la "tribuna" visitante.
El más de centenar de corazones Verdes que oupa la visitante, respiró un poco. Todavía quedaban cerca de 30 minutos pero no se podía festejar. Era mirar al cielo, que pasen los minutos.


Pensábamos que se vendría el vendaval de Luján. Pero era el Verde quien estaba más cerca del tercero que el Lujanero del empate. Se lo perdía Scipione de cabeza. Vallejos metía una de sus bombas. Estaba cerca el tercero.
Rubino trataba de ver cómo emparejar el partido teniendo en cuenta que se tenía que ir del estadio, que lo puteaba a morir. Así que las divididas dejaron de serlas. Todas para el local que ni así preocupaba a Lescano.


Rendimientos parejos hubo en el Verde, con una actitud terrible, se los notaba a todos metidos 100% en el partido, Di Toro volvió a mostrar que de 5 rinde y no como lateral, Gauna se comió la cancha y lo cagaron a patadas todo el partido. El Coni y Gómez te pelean la pelota como si te quisieran afanar la billetera. Mantovani y el Wity también cumplieron. Bruno aguantó todas. Marcos clavó el segundo (llegó a los 40) y tuvo el tercero con una volea que se fue sobre el travesaño.
Y así, mirando el cielo, viendo el partido pero pensando en otra cosa para que pase el tiempo llegó el final. Ese que les describíamos al principio. El de puños cerrados, el de abrazos entre jugadores e hinchas. Empieza otro campeonato. El Verde que le ganó a Luján tiene con qué pelear. Por lo menos los que estamos afuera podemos seguir soñando. Y eso no es poco.


ITUZAINGÓ: Lescano, Scipione, Mantovani y Escobedo; Vallejos, Ibáñez, Di Toro y Gómez; Zampini; Gauna y Rodríguez.
Cambios: Tellas por Rodríguez, Lucano por Zampini, Greco por Gauna.
Suplentes: Ferreiro, Sicari, Cristaldo y Recchia.
DT: San Martín
Árbitro: Rubino (mal)
Estadio: Municipal de Luján.

PERLA NEGRA:
Finalizado el partido la parcialidad local intentó agredir a los jugadores del Verde que se retiraban al vestuario, arrojando cosas desde la tribuna. Además, desde afuera del estadio, energúmenos arrojaban piedras hacia el sector donde estaban los allegados del Verde. Pudo haber terminado en tragedia debido al tamaño de las piedras. Como siempre, hay que agradecer a que generalmente, tienen mala puntería.
Además, los mosquitos unos hijos de puta.
Un Beso Luciana!
Y VAMOS LEÓN !