LA BATALLA DE ITUZAINGÓ

El Verde se jugaba una parada importante, casi decisiva para la continuidad del cuerpo técnico y nada menos que ante un candidato que venía peleando los puestos de arriba. No había otra cosa que ganar para descomprimir un poco el ambiente y sacarse la mufa de 5 partidos sin ganar en este torneo.

Y lo que era un partido de fútbol terminó por transformarse casi en una batalla, con varios expulsados y un golazo que definió el partido.

El Verde salió a la cancha con dos líneas de 4 y dos puntas definidos para enfrentar a un equipo plagado de nombres de categoría como Leguiza, Ibáñez y los ex Ituzaingó Claudio Paz y Lucas Buono.

En la primera etapa el partido fue parejo en la mediocridad, se repartieron desaciertos y hubo pocas chances claras para destacar.

Mantovani se encargó de controlar a Buono y lo hizo de manera impecable, el grandote casi no gravitó en esa etapa. Pero de mitad hacia arriba el Verde no podía hilvanar jugadas de riesgo. La vuelta del Pini Fernández fue dentro de un esquema de 4 volantes que lo ponía a él como el responsable de generar más fútbol junto a Marcos Zampini, sin embargo, nunca pudieron gravitar ni juntarse con Benítez y el Pato Costa.

En la segunda etapa llegarían las emociones, porque a Sebastián Benítez le salió la jugada que intenta todos los partidos sin suerte. Esta vez, se cansó de apilar jugadores entrando de derecha izquierda para definir de manera exquisita contra el palo izquierdo de Paz. Golazo de otro partido, pero que cambió el desarrollo del juego. Argentino se desesperó y el Verde tenía todo para definirlo de contra, hasta que el recientemente ingresado Ríos se hizo echar de una manera muy pelotuda con roja directa complicándole la tarde al Verde.

Luego del tumulto se fueron expulsados además Centurión en el Mate (también roja directa) y Mantovani por doble amarilla.

Y el cordobés Benítez mandó a Dallera a la zaga y puso al pibe Gutiérrez por Seba Benítez. El Verde, sin delanteros, aguantaba el partido reventándola para arriba, pero arriba no había nadie (El Pato de flojo partido también había salido por Ríos).

Y así el Verde batalló y aguantó el partido hasta que Zampini y el Wity Ibáñez entendieron que no servía reventar la pelota y se la jugaron en ataque. Marcos fue clave sobre el final del encuentro, haciéndose cargo de ese ataque ausente, y el 5 del Verde también tuvo sus incursiones.

Sufriendo, con 5 minutos de alargue, así ganó el Verde. Con una tapada heroica de Velázquez sobre el epílogo, como una verdadera batalla, pero se quedó con los tres puntos, tan necesarios como festejados por la toda la gente que aún yendo últimos en la tabla, se acercó para alentar a nuestro querido León.

Un buen paso, quizás un clic. Una victoria tan necesaria como esperada, pero el León debe mejorar muchísimo para seguir subiendo.

Pero a fin de cuentas, un triunfo que se festejó y cómo....

DIA DEL PELOTUDO

En este día del pelotudo que se festejó este 25 de septiembre, Centurión del Mate y Ríos lo festejaron a lo grande.

El 10 del Mate se dedicó sólo a romperle las bolas a los contrarios y a calentar el partido, porque la pelota no la tocó en toda la tarde. Y lo peor de todo fue tras la expulsión de Ríos. Luego del tumulto, mientras el línea llamaba al arbitro para comentarle lo sucedido, el 10 (vendiéndose de manera evidente) acompañaba al arbitro al trote hasta el lateral. Feliz día Boludo !! Obviamente lo expulsaron.

Y Ríos, la verdad que decirle irresponsable le queda corto. Tras varios partidos sin jugar el Cordobés lo puso para definir de contra el partido teniendo en cuenta que iba a tener más espacios, pero el delantero se fue expulsado sin tocar siquiera la pelota, al minuto de estar en cancha. Tras un forcejeo con un rival le pegó un patadón al rival, tan evidente que el juez le mostró la roja directa. Tendrá que preguntarle el cuerpo técnico si le interesa jugar en el club o no, porque con lo visto hoy pareciera que no. Esto no es Muñiz, a ponerse las pilas Ríos. Dejemos el potrero para cuando jugamos con los amigos...